La oculoplastia o cirugía plástica ocular es una subespecialidad de la oftalmología que consiste en una intervención quirúrgica especializada de los párpados, órbita y vías lagrimales. La finalidad es estética, reconstructiva y funcional.

¿Cuándo es necesaria una oculoplastia?

La oculoplastia se emplea para cuestiones estéticas o para enfermedades que afectan la posición y funcionamiento de los párpados, órbitas y vías lagrimales, éstas pueden ser por envejecimiento, tumores o enfermedades de otros tipos. Este procedimiento debe de ser realizado por un oftalmólogo certificado.

Para llevar a cabo la cirugía plástica ocular se usan procedimientos quirúrgicos que requieren ser realizados en quirófanos con equipo diseñado para enfermedades oculares, con microscopios y equipos de microcirugía. Son cirugías ambulatorias habitualmente.

Los alcances de la oculoplastia

Estos procedimientos tienen posibilidad de corregir enfermedades propias del envejecimiento de los párpados. También es posible tratar una parte de la estética facial y mejorar la visión quitando las bolsas en los ojos y las arrugas de los párpados. En casos más graves, la cirugía es reconstructiva, al atender traumatismos, quemaduras y pérdidas del ojo.

La oculoplastia elimina tumores y lesiones inflamatorias correspondientes a padecimientos complejos como: la enfermedad tiroidea o enfermedades autoinmunes que pueden generar problemas en las órbitas y en los párpados, así como en la vía lagrimal, por lo que es una especialidad oftalmológica muy completa con diversas opciones y procedimientos.

 

Para esta intervención quirúrgica se utiliza alta tecnología como láser o radiofrecuencia. Recientemente, se utiliza más el plasma de radiofrecuencia.

 

¿Quién puede someterse a esta cirugía?

El especialista en cirugía plástica ocular es un oftalmólogo, el cual emplea microcirugía, es decir equipo de microscopio quirúrgico diseñado para los ojos. Para ello necesitan equipos de cirugía plástica muy finos.

Todos los pacientes son candidatos a realizarse este procedimiento, ya que son cirugías con anestesia local y con una sedación muy ligera. Realmente no hay restricciones, y si las hubiera, posiblemente sería una enfermedad que alterara seriamente la coagulación.

La forma de preparar al paciente antes de la oculoplastia es únicamente con estudios preoperatorios.

Una de las ventajas de este tratamiento es que la cirugía es ambulatoria, es decir que el paciente llega en ayunas, después pasa a quirófano y se le realiza la cirugía, la cual tarda desde media hora hasta 4 horas (dependiendo del tipo de problema). Una vez que termina la operación y el paciente está libre de los sedantes, regresa a su domicilio a completar su proceso de recuperación.

Recuperación sin mayores contratiempos

El tiempo de recuperación después de la oculoplastia es variable y depende del tipo de operación, pero habitualmente los pacientes operados de los párpados pueden trabajar y hacer su vida normalmente en su domicilio al tercer día.

Los resultados de las distintas cirugías oculoplásticas son inmediatos, pero los procesos de cicatrización y recuperación son variables, hay gente que puede recuperarse entre 3 a 8 semanas.

En caso de haber complicaciones, serían por la falta de experiencia del cirujano o un equipo en malas condiciones. También podrían derivarse cicatrizaciones anormales o correcciones quirúrgicas erróneas en las cuales el ojo quede en mala posición y con incapacidad para cerrarse, pero todo esto depende mucho de la experiencia del especialista y del adecuado mantenimiento de los equipos para realizar las cirugías.

Al final la recomendación es visitar a su Oftalmólogo o en su defecto visitar nuestro sitio web  https://medicosenmerida.mx/medicos-en-merida/oftalmologos/ para encontrar el especialista que mejor se adapte a sus necesidades.