Descripción general
La coartación aórtica o «estrechamiento de la aorta» es una constricción de la aorta, el vaso sanguíneo grueso que se ramifica desde el corazón y que abastece al organismo de sangre rica en oxígeno. Cuando esto ocurre, el corazón debe bombear con más fuerza para empujar la sangre a través de la parte estrecha de la aorta.
En general, la coartación aórtica está presente al nacer (congénita). Esta afección puede variar de leve a grave, y es posible que no se detecte hasta la adultez, dependiendo de cuánto se haya estrechado la aorta.
La coartación aórtica a menudo está acompañada de otros defectos cardíacos. Si bien el tratamiento suele ser exitoso, este trastorno requiere un seguimiento cuidadoso de por vida.
Síntomas
Los síntomas de la coartación aórtica dependen de la gravedad de la enfermedad. La mayoría de la gente no presenta síntomas. Los niños con estrechamiento grave de la aorta pueden mostrar signos y síntomas a una edad más temprana, pero es posible que los casos sin síntomas no se diagnostiquen hasta la adultez. Las personas también pueden tener signos o síntomas de otros defectos cardíacos que tengan junto con la coartación aórtica.
Los bebés con coartación aórtica grave pueden comenzar a tener signos y síntomas poco después del nacimiento. Algunos de ellos son:
- Piel pálida
- Irritabilidad
- Sudoración intensa
- Dificultad para respirar
- Dificultad para alimentarse
Si no se trata, la coartación aórtica en bebés podría provocar insuficiencia cardíaca o la muerte.
Los niños más grandes y los adultos con coartación aórtica generalmente no tienen síntomas, dado que es posible que el estrechamiento sea menos grave. Si tienes signos o síntomas que aparecen después de la infancia, lo más probable es que tengas presión arterial alta (hipertensión) en los brazos. Sin embargo, es posible que tu presión arterial sea inferior en las piernas. Algunos signos y síntomas son:
- Presión arterial alta
- Dolor de cabeza
- Debilidad muscular
- Calambres en las piernas o pies fríos
- Sangrado nasal
- Dolor en el pecho
Cuándo consultar al médico
Busca ayuda médica si tú o tu hijo tienen los siguientes signos o síntomas:
- Dolor intenso en el pecho
- Desmayo
- Dificultad repentina para respirar
- Presión arterial alta sin causa aparente
Si bien sentir estos signos o síntomas no necesariamente significa que tienes un problema grave, es mejor que te examinen rápidamente. La detección y el tratamiento tempranos podrían salvarte la vida.
Causas
Los médicos no saben con certeza qué provoca la coartación aórtica (estrechamiento de la aorta). Debido a razones que se desconocen, una parte de la aorta se hace leve o gravemente más angosta. Aunque la coartación aórtica puede presentarse en cualquier parte de la aorta, generalmente, se manifiesta cerca de un vaso sanguíneo llamado «conducto arterial». Por lo general, la afección comienza antes del nacimiento (congénita). Los defectos cardíacos congénitos son los defectos congénitos más frecuentes.
La coartación aórtica casi nunca se presenta posteriormente en la vida. Una lesión traumática puede causar la coartación aórtica. En raras ocasiones, el endurecimiento grave de las arterias (ateroesclerosis) o una enfermedad que causa inflamación de arterias (arteritis de Takayasu) pueden hacer que la aorta se vuelva más angosta y desencadenar así la coartación aórtica.
La coartación aórtica, generalmente, se manifiesta más allá de los vasos sanguíneos que se ramifican hacia la parte superior del cuerpo y antes de los vasos sanguíneos que van hacia la parte inferior del cuerpo. Con frecuencia, esto puede causar presión arterial alta en los brazos y presión arterial baja en las piernas y en los tobillos.
Debido a la coartación aórtica, la cavidad cardíaca inferior izquierda (ventrículo izquierdo) del corazón trabaja más arduamente para bombear sangre a través de la aorta estrechada, y la presión arterial aumenta en el ventrículo izquierdo. Esto puede hacer que la pared del ventrículo izquierdo se engrose (hipertrofia).
Factores de riesgo
La coartación aórtica a menudo se produce junto con otros defectos cardíacos de nacimiento, aunque los médicos desconocen qué es lo provoca la aparición conjunta de diversos defectos cardíacos. Esta afección es más frecuente en los hombres que en las mujeres. Tú o tu hijo pueden tener más probabilidades de sufrir coartación aórtica si tienen ciertas enfermedades cardíacas, entre ellas:
- Válvula aórtica bicúspide. La válvula aórtica separa la cavidad izquierda inferior del corazón (ventrículo izquierdo) de la aorta. La válvula aórtica bicúspide tiene dos aletas (valvas) en lugar de las tres habituales. Muchas personas con coartación aórtica tienen una válvula aórtica bicúspide.
- Conducto arterial persistente. Antes del nacimiento, el conducto arterial es un vaso sanguíneo que conecta la arteria pulmonar izquierda con la aorta, lo cual permite que la sangre eluda los pulmones.
Poco después del nacimiento, el conducto arterial generalmente se cierra. Sin embargo, si permanece abierto, se llama «conducto arterial persistente».
- Orificios en la pared que se encuentra entre los lados izquierdo y derecho del corazón. Al nacer, es posible que tengas un orificio en la pared (tabique) que se encuentra entre las cavidades superiores del corazón (comunicación interauricular) o entre las cavidades inferiores del corazón (comunicación interventricular).
Esto hace que la sangre rica en oxígeno proveniente del lado izquierdo del corazón se mezcle con la sangre con poco oxígeno en el lado derecho del corazón.
- Estenosis de la válvula aórtica. Consiste en el estrechamiento de la válvula que separa el ventrículo izquierdo del corazón de la aorta (válvula aórtica). Esto significa que el corazón tiene que bombear con más fuerza para que llegue suficiente sangre al cuerpo.
Con el tiempo, esto puede provocar el engrosamiento del músculo cardíaco y puede dar lugar a síntomas como dolor de pecho, desmayos y dificultad para respirar o insuficiencia cardíaca.
- Insuficiencia valvular aórtica. Esta se produce cuando la válvula aórtica no se cierra bien, lo que provoca fugas de sangre de regreso al ventrículo izquierdo.
- Estenosis mitral. Consiste en el estrechamiento de la válvula (válvula mitral) entre la cavidad cardíaca superior izquierda (aurícula izquierda) y el ventrículo izquierdo, la cual permite que la sangre fluya a través del lado izquierdo del corazón.
En esta enfermedad, la sangre puede retroceder y entrar a los pulmones, lo que causa dificultad para respirar o congestión pulmonar. Al igual que la estenosis de la válvula aórtica, esta enfermedad también puede provocar insuficiencia cardíaca.
- Insuficiencia de la válvula mitral. Esta se produce cuando la válvula mitral no se cierra bien, lo que provoca fugas de sangre de regreso a la aurícula izquierda.
La coartación aórtica es también más frecuente en personas que tienen ciertas enfermedades genéticas, como síndrome de Turner. Las mujeres y las niñas con síndrome de Turner tienen 45 cromosomas, con un cromosoma X faltante o incompleto, en lugar de 46. Cerca del 10 por ciento de las mujeres y las niñas con el síndrome de Turner tienen coartación aórtica.
Habla con el médico si tú o tu hijo presentan alguno de estos factores de riesgo o si tienen antecedentes familiares de enfermedad cardíaca congénita.
Complicaciones
La coartación aórtica sin tratar suele generar complicaciones. Algunas complicaciones pueden deberse a la presión arterial alta de larga data causada por la coartación aórtica. También puede haber complicaciones luego del tratamiento de la coartación aórtica.
Las complicaciones de la coartación aórtica comprenden:
- Estrechamiento de la válvula aórtica (estenosis aórtica)
- Presión arterial alta
- Accidente cerebrovascular
- Agrandamiento de una sección de la pared de la aorta (aneurisma)
- Rotura o desgarro aórticos (disección)
- Enfermedad prematura de las arterias coronarias (estrechamiento de los vasos sanguíneos que irrigan el corazón)
- Insuficiencia cardíaca
- Arteria debilitada o protuberante en el cerebro (aneurisma cerebral) o sangrado en el cerebro (hemorragia)
Además, si la coartación aórtica es grave, el corazón quizás no pueda bombear suficiente sangre a los otros órganos. Esto puede dañar el corazón y también provocar insuficiencia renal o de otro órgano.
Si te trataron la coartación aórtica cuando eras joven, existe el riesgo de que, con el tiempo, la aorta se vuelva a estrechar (recoartación). También corres mayor riesgo de sufrir presión arterial alta. Necesitarás seguimiento de por vida para la coartación aórtica y, posiblemente, requieras tratamientos adicionales.
Prevención
La coartación aórtica no se puede prevenir, porque, por lo general, está presente al momento del nacimiento (es congénita). Sin embargo, si tu hijo tiene una afección que aumenta el riesgo de tener coartación de la aorta, como el síndrome de Turner, válvula aórtica bicúspide u otro defecto cardíaco, o antecedentes familiares de enfermedad cardíaca congénita, la detección temprana puede ayudar. Analiza el riesgo de tener coartación de la aorta con tu médico.
Al final la recomendación es visitar a su CARDIOLOGO o en su defecto visitar nuestro sitio web https://medicosenmerida.mx/medicos-en-merida/cardiologos/ para encontrar el especialista que mejor se adapte a sus necesidades.