El trasplante de córnea es un procedimiento quirúrgico que permite reemplazar este lente natural que se ubica en la parte anterior del ojo.

Cuando la córnea pierde su transparencia, ésta se sustituye por medio de una cirugía de ojos. Un trasplante de córnea se realiza por diversas enfermedades, pero todas tienen el en común la opacidad de esta lente natural del ojo.

 

Tipos de cirugía de ojos para trasplante de córnea

Un trasplante de córnea se lleva a cabo con una de 3 diferentes técnicas.

La primera es cuando se sustituye la córnea completa conocida como de espesor total; la segunda consiste en el reemplazo de sólo una parte anterior de la córnea y la tercera tiene como característica la intervención o cambio de sólo una capa en la parte posterior de la córnea.

 

La importancia del diagnóstico del oftalmólogo

Para la selección de una de estas técnicas de cirugía el oftalmólogo tomará en cuenta el tipo de patología o enfermedad que esté originando la pérdida de transparencia en la córnea del paciente.

Una vez que se haya perdido la pérdida de transparencia de la córnea, la cirugía de trasplante es necesaria.

 

Cuándo es necesaria este tipo de cirugía de ojos

Las causas principales que ocasionan la pérdida de transparencia de la córnea son varias, pero destacan infecciones y úlceras corneales.

Las úlceras corneales son muy comunes en los pacientes jóvenes quienes muchas veces se quedan dormidos con los lentes de contacto.

 

El trasplante de córnea también se realiza en aquellos pacientes con queratocono y que, a pesar de todos los medicamentos prescritos por el especialista, no hay mejora.

Por tal motivo, cuando un paciente padece queratocono, muchas veces, la cirugía se presenta como la mejor solución con el objetivo de reemplazar la córnea debido a la gran deformidad que tiene este paciente.

 

Cuando la córnea fue afectada por una cirugía de ojos previa

El trasplante de córnea también es una solución para aquellos pacientes quienes fueron operados por cirugía de catarata y, por alguna razón, la córnea no resistió el procedimiento quirúrgico.

Cuando esto ocurre, se cambia la córnea, o bien, a veces sólo se reemplaza el endotelio, procedimiento denominado trasplante endotelial.

En la actualidad, y en el mundo, este factor es una de las principales causas para llevar a cabo un trasplante de córnea, principalmente en las sociedades industrializadas. En México va en aumento este tipo de incidencia.

Otras enfermedades que pueden llevar a un trasplante de córnea

Existen otras enfermedades con las que un médico especialista podría acudir a un trasplante de córnea para quitar los malestares en el paciente entre las que se encuentran las degeneraciones de córnea o alteraciones en la formación del lente, o bien, cualquier circunstancia que produzca una alteración en la transparencia.

En la actualidad ya no se ven aquellas secuelas de ojos vendados en los pacientes que se sometieron a un trasplante de córnea y que se descubrían después de varios días.

Ahora el paciente sólo sale con un protector ocular con recomendaciones del oftalmólogo para una rehabilitación muy sencilla.

Cirugía de ojos menos invasivas

Cada vez, los avances de las técnicas quirúrgicas para el trasplante de córnea permiten a los especialistas que los procedimientos sean menos invasivos, incapacitantes e incómodos para los pacientes.  Cabe mencionar que todo trasplante de córnea conlleva riesgos porque se está usando tejido donado.

Principales riesgos de los trasplantes de córnea

El principal riesgo de un trasplante de córnea es el rechazo, pues existe la posibilidad, en cierto porcentaje, de que algunas córneas sean rechazadas por el organismo receptor, pero esto va en relación con la enfermedad que origina el trasplante.

Si se trata de una enfermedad más grave por infecciones o por inflamación, las posibilidades de rechazo son mayores, pero en la mayoría de las cirugías, esta incidencia es menor.

 

La importancia de seguir las indicaciones del oftalmólogo

Otra posible complicación después de un trasplante de córnea es una infección, por tal motivo son muy importantes los cuidados posoperatorios como la higiene y que el paciente siga todas las indicaciones del oftalmólogo, sobre todo en la aplicación de gotas de antibiótico y desinflamatorio. De esta manera se disminuye mucho el riesgo y la probabilidad de una complicación.

 

Al final la recomendación es visitar a su OFTALMOLOGO o en su defecto visitar nuestro sitio web https://medicosenmerida.mx/medicos-en-merida/oftalmologos/ para encontrar el especialista que mejor se adapte a sus necesidades.